Paz, justicia e instituciones sólidas
El ODS 16 aborda la calidad institucional y cuestiones imprescindibles para la sostenibilidad del conjunto del sistema social, como son la paz y el respeto a los derechos fundamentales. Un hito clave es reducir la incidencia de los delitos y de los actos violentos de cualquier tipo, erradicando completamente los que afecten a la infancia. Esto pasa por intensificar la lucha contra el crimen, especialmente el terrorismo y la delincuencia organizada que trafica con armas, dinero y personas.
Las otras metas perfilan el modelo a seguir por todas las instituciones públicas: deben ser eficaces, responsables y transparentes, plenamente comprometidas con la lucha contra la corrupción, y favorecedoras de una democracia inclusiva, participativa y representativa. Por lo demás, estas instituciones deben proteger las libertades fundamentales y garantizar un acceso universal a la justicia, en condiciones de igualdad.