El cine y los trenes

No es casual que una de las primeras películas de la historia, rodada 1896, sea la que lleva por nombre La llegada de un tren en la estación. En ella sólo salía, en menos de un minuto, lo que dice el título: un ferrocarril que llega a la estación de la ciudad. Siempre se ha creído, sin que se haya podido confirmar su veracidad, que la primera reacción del público fue de terror, y que pensando en que el tren les iría encima, huían despavoridos de la sala.

Desde entonces, el tren, como el cine, ha acabado convirtiéndose en símbolo de progreso y civilización. Y si bien uno permitió llegar, hasta la llegada de la aviación bien entrado el siglo XX, a lugares impensables sólo unas décadas antes, el cine nos ha dado los medios para expandir otro tipo de fronteras, a veces más difíciles de atravesar: las mentales.

En la historia del cine, los trenes han sido esencialmente un medio de transporte que nos han llevado a lugares tan alejados como en Kenia (en Memorias de África, 1985), o el lejano oeste (en El maquinista de la General, 1927). Pero también el tren ha marcado la frontera entre los colonos y los nativos americanos (Union Pacific, 1939), o entre la ley y los lugares donde no existen (Conspiración de silencio, 1955); ha sido el escenario de perversas maquinaciones (Extraños en un tren, 1951), de conflictos bélicos (El tren, 1964), de grandes historias de amor (Breve encuentro, 1945), del comienzo de algunas (Antes del amanecer, 1995), o la terminación de otros (Locuras de verano, 1956). Y de una manera simbólica, también la marcha de un tren puede ser también el fin de una etapa de la vida (Cinema Paradiso, 1989), o la última oportunidad para retener la inocencia de la infancia (Polar Express, 2004).

En esta conferencia se analizan algunas (sólo algunas) grandes películas de la historia del cine en las que los trenes han tenido un destacado protagonismo, bien como escenarios de la historia o como intérpretes más o menos involuntarios. Si estás interesado/a, reserva billete de primera clase en un viaje donde disfrutarás de todas las comodidades y te prometemos un rato muy agradable.