Desinfección en la zona de recreo de la calle Antoni Sedó (foto: Ayuntamiento de Rubí - Lali Puig)

Las zonas de recreo para perros se desinfectan con un producto viricida, bactericida y fungicida

Una vez finalizada la actuación, se pega un adhesivo en la puerta donde se indica la fecha de la última actuación

El Ayuntamiento de Rubí desinfecta las zonas de recreo para perros con un producto desinfectante, viricida, bactericida y fungicida desde el pasado 12 de noviembre. La actuación la lleva a cabo la empresa que realiza las tareas de limpieza viaria de la ciudad, con una periodicidad quincenal.

Según el pliego de prescripciones técnicas del contrato de limpieza viaria, esta desinfección la ejecutará un equipo específico que se encarga de rociar, con un producto desodorizante e inocuo para las mascotas, las zonas de recreo para perros con cierre.

La prestación de este servicio va más allá de lo que marca el pliego y el producto usado tiene funciones desinfectantes, viricidas, bactericidas y fungicidas. Generalmente, estas tareas se realizan por la noche para una mayor comodidad a la hora de aplicar el producto.

Una vez finalizada la actuación en cada zona de recreo, el operario coloca un adhesivo en la puerta donde se indica la fecha de la actuación de desinfección.

 

Zonas para el recreo de los perros

El espacio público es un lugar de convivencia y hay que dotarlo de los elementos necesarios para que esto sea posible. Uno muy importante son las áreas destinadas al recreo de los perros.

Rubí apuesta por la buena convivencia entre las personas y los animales de compañía. Por este motivo, aparte de las normas que deben cumplir los propietarios de perros para ejercer una tenencia responsable y cívica, el Ayuntamiento contribuye con servicios específicos, tales como espacios donde estas mascotas puedan correr y jugar.

En las zonas de recreo para perros se deben cumplir todas las normas de seguridad e higiene que marca la Ordenanza reguladora de la tenencia de animales del Ayuntamiento de Rubí, excepto la de llevar los perros atados con la correspondiente cadena o correa. Los perros potencialmente peligrosos, en cambio, deben llevar bozal y, en ningún caso, no pueden circular sin ir atados.

El resto de medidas de seguridad e higiene no se ven modificadas y, por tanto, al igual que en el resto de los espacios públicos de la ciudad, en las zonas de recreo para perros es obligatorio recoger los excrementos y tirarlos a una papelera o contenedor.