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Las empresas BJC y Deltalab explican cómo el proyecto Smart PAE las ha ayudado a ser más competitivas Con esta iniciativa, el Consistorio rubinense pretende mejorar los servicios energéticos eléctricos y de telecomunicaciones que se ofrecen a las compañías de la ciudad https://www.rubi.cat/@@site-logo/ajuntament-de-rubi.png

Las empresas BJC y Deltalab explican cómo el proyecto Smart PAE las ha ayudado a ser más competitivas

Con esta iniciativa, el Consistorio rubinense pretende mejorar los servicios energéticos eléctricos y de telecomunicaciones que se ofrecen a las compañías de la ciudad

La alcaldesa de Rubí, Carme García, y algunas de las empresas de la ciudad que participan en el proyecto municipal Smart PAE han explicado este lunes los primeros resultados de esta prueba piloto. En 2013, el Ayuntamiento impulsó esta iniciativa en el marco del proyecto estratégico Rubí Brilla, con el objetivo de convertir el polígono de La Llana en el primer Smart PAE de la ciudad.

Con este proyecto, financiado dentro del Plan de medidas anticrisis 2013, el Consistorio pretende mejorar los servicios energéticos eléctricos y de telecomunicaciones que se ofrecen al conjunto de las empresas, reduciendo el coste e incrementando así su competitividad. Un objetivo que, a su vez, permitirá atraer nueva actividad económica a la ciudad, especialmente empresas de valor añadido. Según ha explicado la alcaldesa, Carme García, "estamos intentando que, sumando sinergias entre el Ayuntamiento, la universidad y las empresas, se pueda mejorar la competitividad a unos costes muy asequibles tanto para el Consistorio como para las compañías".

En una primera etapa del proyecto piloto se presentó la iniciativa a las empresas del PAE La Llana y se hizo el trabajo de consultoría. Paralelamente, el Ayuntamiento, en conjunción con la compañía Apfutura y la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), a través de su centro de transferencia de tecnología CITCEA, iniciaron el despliegue de las infraestructuras y sistemas necesarios. Este trabajo comenzó por el alumbrado y los edificios públicos del polígono, es decir, el Pabellón de La Llana y la Masia de Can Serra, que gracias a este proyecto han podido optimizar su consumo energético.

Inicialmente, un total de seis empresas participaron en el proyecto, a las que se ha proporcionado servicios energéticos y de telecomunicaciones. Se trata de BJC, Deltalab, Rubinum, Virutex, Frepi y EFF. Ahora se ha iniciado una segunda fase de la prueba piloto, en la que se han sumado B. Braun, Rubí Industrial, Germans Roche, Continental y Grifoll.

En cuanto a los servicios energéticos, CITCEA-UPC ha ofrecido, entre otros, servicios de diagnóstico y auditoría energética y de inmunización a problemas de calidad del suministro eléctrico. En materia de telecomunicaciones, se han facilitado a las empresas servicios de telefonía, conexiones de internet de entre 50 MB y 100 MB simétricos y centralitas virtuales, entre otros servicios.

Según calcula el Ayuntamiento, la inversión inicial que deben hacer las compañías que se acogen a esta prueba piloto se recuperará en un periodo de entre seis meses y dos años. A cambio de esta aportación, las empresas pueden obtener ahorros de hasta el 20% en materia energética y de hasta el 40% en telecomunicaciones. Cabe destacar, además, que las compañías que se han implicado en esta iniciativa también pueden disponer de las nuevas infraestructuras, como por ejemplo la conexión de fibra óptica o los equipos de medida de gasto energético, sea cual sea el futuro del proyecto, ya que serán de su propiedad.

Tanto Jonás Espinosa, administrador del sistema de Deltalab, como Aleix Torres, responsable de informática de BJC, han coincidido a la hora de valorar muy positivamente la participación de sus respectivas empresas en esta prueba piloto. "Ha sido una experiencia muy positiva, no dudamos en apuntarnos al proyecto piloto. Cuando vimos los costes nos decidimos rápido", ha asegurado Aleix Torres. El trabajador de BJC también ha añadido que, "en cuanto a las telecomunicaciones, es muy importante el hecho de que sea una conexión simétrica, porque para una empresa posiblemente es más importante la velocidad de envío que la de recepción". Por su parte, Jonás Espinosa ha explicado la diferencia entre el servicio que tenían contratado antes y el actual: "Con la conexión que teníamos antes prácticamente no se podía trabajar [...]. Teníamos dos ADSL de 10 megas y un mega de subida. Íbamos, como se dice coloquialmente, a pedales. Gracias a la ayuda del Ayuntamiento y de Apfutura, hemos implantado un simétrico de 100 megas y estamos contentísimos. Yo creo que es una de las mejores decisiones que se han tomado en Deltalab en el área de infraestructuras. Ha sido muy positivo y animo las otras empresas a participar en el proyecto".

Durante el año 2015 será el momento de consolidar un modelo definitivo de Smart PAE para La Llana, con el objetivo también de poderlo trasladar al resto de polígonos de la ciudad.

Redes de telecomunicaciones de alta capacidad
Gracias a la experiencia del proyecto Smart PAE, el polígono de La Llana fue elegido el año pasado para poner en marcha una prueba piloto en el marco del proyecto SODALES. Se trata de una iniciativa europea coordinada por la Fundació i2CAT que cuenta con la participación de las instituciones Portugal Telecom Inovaçao, Ethernity, Networks, University of Essex y Fraunhofer Heinz-Heindrich Institut. SODALES es un proyecto a tres años (2012-2015) que, en su última fase, contempla diferentes pruebas piloto para testear las tecnologías desplegadas. La prueba piloto que se lleva a cabo en Rubí permitirá a las empresas participantes disponer de redes de telecomunicaciones de alta capacidad a través de fibra óptica y tecnologías de radio.

Las empresas que han participado en la prueba piloto del Smart PAE son las mismas que se podrán beneficiar de la nueva tecnología. Estas compañías podrán disfrutar de conexiones de 100 Mbps simétricos, ya sea a través de fibra óptica o radiofrecuencia, sin necesidad de invertir en nuevas infraestructuras y a un precio muy asequible. El servicio irá a cargo de Apfutura, un operador de proximidad que ya ha participado en el proyecto Smart PAE y que trabaja específicamente en aquellos lugares donde la cobertura de las grandes compañías de telecomunicaciones es escasa.