Un millar de personas disfrutan de la verbena de Sant Joan en el Escardívol
La noche más corta del año ha transcurrido sin grandes incidentes en Rubí, según ha informado la Policía Local
Alrededor de un millar de personas han vivido la verbena de Sant Joan en el Escardívol, donde se han concentrado un año más los actos organizados por el Ayuntamiento con el apoyo de la Colla de Diables de Rubí y Òmnium Rubí. La noche más corta del año ha arrancado con la llegada de la Llama del Canigó a la plaza Pere Aguilera, donde ha sido recibida por el concejal de Cultura, Moisés Rodríguez, y otros representantes del equipo de gobierno y de los grupos municipales. En este punto, las entidades han hecho lectura del tradicional manifiesto de la Llama del Canigó, este año firmado por el escritor Andreu Carranza.
Después de cumplir con el tradicional protocolo, el fuego ha sido trasladado por los Diables de Rubí hasta el Escardívol, donde se ha encendido la gran hoguera que ha quemado viejos objetos y deseos aportados por los rubinenses.
La vertiente más tradicional de la verbena ha dado paso a las actuaciones musicales, a cargo del grupo de versiones The Killing Hits y los DJ Light Riders, que han animado a los asistentes a bailar hasta la madrugada.
Una verbena tranquila
Rubí ha vivido este año una verbena bastante tranquila, en la que la Policía Local sólo ha tenido que atender 14 servicios, la mayoría producidos por pequeños incendios de matorrales y de contenedores, así como desperfectos ocasionados por el uso de la pirotecnia. El cuerpo de seguridad también ha tenido que intervenir en una pequeña pelea que se ha saldado sin lesiones.
El servicio de urgencias del CAP Mutua, por su parte, ha asistido a tres personas por quemaduras leves y dos por agresiones, con lesiones también de carácter leve.
Este año la Policía Local ha contado con la colaboración de los voluntarios de Protección Civil, que han dado apoyo en varias intervenciones con un vehículo equipado con bomba de agua.
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