Rubí presenta a Red Eléctrica Española la propuesta presupuestaria que hará posible el desplazamiento de la línea de Can Fatjó

La alcaldesa, Ana María Martínez Martínez, acompañada del regidor de Proyección de la Ciudad y Proyectos Estratégicos, Moisés Rodríguez Cantón, y el gerente de la corporación, Jordi Nuñez Freixa; se han reunido este jueves en Madrid con el presidente de Red Eléctrica Española (REE), Jordi Sevilla Segura, para trasladarle la propuesta presupuestaria que hará posible el desplazamiento de las líneas de alta tensión del barrio de Can Fatjó.

La propuesta del Ayuntamiento de Rubí que prevé la financiación del proyecto en tres años es un paso más para conseguir eliminar este tendido eléctrico de la ciudad como se pide desde el municipio desde hace años.

“Sacar el tendido eléctrico de Can Fatjó es un compromiso firme del equipo de gobierno que represento, por eso hoy estamos aquí con los deberes hechos. Estamos comprometidos y REE, también. Espero que podamos ver cerrada esta cicatriz histórica de Rubí durante este mandato”, ha dicho la alcaldesa.

Ayuntamiento y REE encaran ahora la fase de validación del proyecto ejecutivo que tendrá que adaptarse al nuevo reglamento de los tendidos eléctricos aéreos de alta tensión.

Una demanda histórica
El año 2006, el Ayuntamiento de Rubí y el Instituto Catalán de la Energía (ICAEN) firmaron un convenio que contemplaba el desplazamiento de la línea eléctrica de Can Fatjó. Concretamente, se establecía que el consistorio asumiría un 20% del coste de ejecución del proyecto (más las expropiaciones y servidumbres) y el ICAEN, el 80% restante. Paralelamente, Red Eléctrica Española, titular de la línea, asumía el coste de la redacción del proyecto. Este convenio quedó parado a causa de los efectos de la crisis económica. Así, la Generalitat no consignó ninguna partida en concepto de desplazamiento de tendidos eléctricos, argumentando que tenía que atender otras prioridades. Hace cuatro años, el ICAEN denunció este convenio. El Ayuntamiento recorrió la denuncia y ahora se está a la espera de resolución por parte de la Generalitat.

Después de una reunión mantenida con responsables de la Subdirección General de Energía Eléctrica para intentar desencallar esta situación, el Ayuntamiento decidió asumir el coste de la actuación, en coordinación con Red Eléctrica Española, y posteriormente, reclamar a la Generalitat que pague la parte que le corresponde.