La alcaldesa expresa el pésame del Ayuntamiento por la muerte de Josep Maria Roset
El rubinense, fallecido a los 88 años, es todo un referente de la fotografía en Cataluña y un elemento clave en la documentación histórica de Rubí
El fotógrafo rubinense Josep Maria Roset ha muerto este martes, 1 de septiembre, a la edad de 88 años. La alcaldesa, Ana María Martínez Martínez, ha expresado el pésame del Ayuntamiento por la pérdida del autor, reconocido internacionalmente por su extensa y valiosa obra fotográfica y especialmente querido en Rubí por el papel que jugó como dinamizador de la cultura local: "Nos deja un legado inconmensurable; sus imágenes perdurarán para siempre [...] Es un orgullo para Rubí y una figura relevante de la fotografía contemporánea", ha manifestado la primera edil.
Nacido en 1932, Roset comenzó a tomar fotografías ya muy joven. Abrió su primer estudio en Rubí en 1957, y entre 1959 y 1962 desarrolló su trabajo como fotoperiodista en Madrid y Francia, donde documentó hechos históricos como la muerte de Gregorio Marañón o la boda del Sha de Persia. En 1962, volvió a Rubí y abrió un nuevo estudio, desde el que dejó constancia de la vida social de la población y de la comarca.
Durante más de 50 años de profesión, se convirtió en un testigo de primera línea de la transición democrática en el Vallès. Su legado es muy amplio, con casi 350.000 negativos, y su fondo documental es especialmente valioso por su temática local. El Archivo Municipal conserva actualmente una importante colección de más de 1.500 fotografías históricas locales recopiladas por Roset de diferentes autores y procedencias, digitalizadas en 1997 en el marco de un convenio con el Ayuntamiento.
Aparte de su importante labor como fotógrafo, Roset es un actor indispensable del tejido asociativo cultural rubinense. En 1967, participó en la fundación del Grup Fotogràfic El Gra, y en 1973 fue confundador de la sala de arte Doble Sis, referente de la vanguardia artística en el Vallès. El rubinense también fue fotógrafo de El Globus, el CATEX, el Centre Dramàtic del Vallès y el Institut del Teatre de Terrassa.
Hasta su muerte, Roset ha seguido estrechamente vinculado a la vida cultural local, y se le ha podido ver en diferentes eventos relacionados con la fotografía, como las diferentes ediciones del Festival de Fotografía La Nuu. En 2016, la Associació Sant Galderic organizó en la ciudad una exposición retrospectiva de su obra y la publicación del libro Tal como yo lo he visto, fotografías de Josep Maria Roset. Y el año pasado, fue uno de los galardonados en los premios Gent del barri, gent de Rubí que organiza la Asociación de Vecinos de la Zona Mercat.
Los reconocimientos, sin embargo, también le han llegado de fuera de la ciudad. La placa de San Juan Bosco (1969), el Premio Especial del Trofeo Egara (1970) o el Premio Negtor (1970) son algunos de los galardones que han obtenido. En 2018, recibió la Creu de Sant Jordi en reconocimiento a la labor de investigación fotográfica y en su obra, así como por su compromiso con el entorno de Rubí y del Vallès como promotor y fundador de entidades culturales.
El velatorio de los restos de José María Roset tendrá lugar este miércoles de 10 a 20 h en el Tanatorio de Rubí y la misa funeral se celebrará el jueves a las 10 h en la iglesia de Sant Pere.