Alumnos de 6º y 1º de ESO participan en los mercados de intercambio de objetos de segunda mano y manualidades
La propuesta, que aglutina a unos 750 chicos y chicas, pretende promover una idea de consumo responsable y más sostenible, alargando la vida útil de los objetos
Unos 750 jóvenes de los centros educativos de la ciudad realizarán, entre el 1 y el 20 de junio, pequeñas sesiones de mercados de intercambio de objetos de segunda mano y manualidades. Con esta actividad, dirigida a los alumnos de 6º de primaria y de 1º de ESO, se pretende promover una idea de consumo responsable y más sostenible, alargando la vida útil de los objetos. La propuesta se enmarca en la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, que tiene lugar el 5 de junio.
Durante el proceso de negociación y de intercambio se otorga un valor a los objetos, en lugar de considerarlos un estorbo. De esta manera prevenimos residuos y, al mismo tiempo, la extracción innecesaria de recursos naturales para su fabricación y el impacto ambiental del proceso de transformación. "El intercambio es una manera de consumo responsable, ya que lo que para unos puede ser un residuo, para otros puede convertirse en un tesoro", ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Moisés Rodríguez. Este año, el Servicio Educativo de Residuos ha vuelto a programado esta actividad, que el año pasado, en su primera edición, tuvo mucho éxito entre el alumnado de los centros participantes.
Durante estos días se han programado un total de 8 intercambios entre 4 institutos y 7 escuelas de la ciudad, donde el alumnado tendrá la oportunidad de intercambiar objetos personales que no usa en casa u objetos que hayan creado los chicos y chicas con sus manos y su imaginación.
Intercambio de objetos y de experiencias
Esta actividad cuenta con un valor añadido: el intercambio de experiencia entre alumnos de diferentes ciclos. En los pequeños mercados participarán alumnos de 6º y 1º de ESO, siendo estos últimos los anfitriones.
El objetivo de esta organización es que, aquellos niños y niñas que se encuentran en un punto de transición y cambio hacia la adolescencia, así como hacia un nuevo formato de centro educativo ─el instituto─, puedan normalizar este paso y hacerlo más tangible. "La idea es que tengan la oportunidad de compartir sus inquietudes con otros adolescentes que acaban de pasar por esta vivencia", ha comentado Rodríguez.