El Ayuntamiento recupera la fuente de Can Matarí, tapiada desde hacía más de 25 años
La mina de agua es muy similar, en cuanto a la forma y el tamaño, a la fuente de Can Moritz, también rehabilitada recientemente
El Ayuntamiento ha finalizado las obras de rehabilitación de la fuente de Can Matarí, en Castellnou. Se trata de una mina de agua de titularidad municipal, que llevaba más de 25 años tapiada.
La fuente se ubica en el torrente de Can Matarí. Durante los trabajos de recuperación, se ha comprobado que no se trata exactamente de una fuente, sino de una mina de agua muy similar en cuanto a forma y tamaño a la de la fuente de Can Moritz.
No existe una base documental histórica del origen de esa mina de agua. Sin embargo, según se informa en el blog del Grup de Col·boradors del Museu de Rubí y Centre Excursionista de Rubí, Louis Moritz ─fundador de la casa de cervezas del mismo nombre─ compró en las afueras de Rubí la finca donde se ubicaba la desaparecida masía de Can Matarí con la intención de hacer una casa de veraneo. Fueron sus herederos quienes finalmente, en 1920, hicieron edificar la residencia modernista, de la que se desconoce el arquitecto. En los años 50, la familia Moritz vendió la finca a Construcciones Junyent, que reparceló los terrenos y, de esta forma, nació la urbanización de Castellnou.
Como no había un fondo documental que estipulara cómo debía hacerse la rehabilitación, el Ayuntamiento ha optado por recuperar la mina de agua, que llevaba más de un cuarto de siglo tapiada, garantizar el drenaje de agua y hacer una ornamentación con material de acero corten con el dibujo de la actual casa de Can Moritz o Can Matarí.
"Esta recuperación del patrimonio añade un nuevo elemento al relato de toda la zona de la fuente de Can Mortiz, haciendo especialmente singular este tramo de la ruta 8 de la red de itinerarios naturales de Rubí", ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Transición Ecológica y Bienestar Animal, Andrés Medrano Muñoz.
El equipo de mantenimiento trasladará las vallas de madera que prohíben acceder al entorno de Can Moritz justo antes de la fuente, con el objetivo de integrarla en este entorno natural.
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